Sebastian
Director Senior de Productos Globales, Marketing Global
Hollister es como una familia para mí más que solo un lugar de trabajo.
Había trabajado en marketing para compañías farmacéuticas y sanitarias, así que estaba familiarizado con el sector antes de entrar en Hollister. Noté de inmediato una diferencia con mi trabajo anterior. Desde el primer día, mis compañeros de Hollister han sido cooperativos, amigables, honestos, agradecidos y solícitos. Al final de mi primera semana aquí, me sentí totalmente integrado como si llevase años trabajando en la empresa. Esta fuerte cultura me ha hecho sentirme apoyado desde el primer día como Jefe de Producto Junior en Alemania, en mis responsabilidades cada vez mayores en el sector del Marketing global actual. Hollister es como una familia para mí más que solo un lugar de trabajo.
Soy una persona emprendedora y me apasiona el marketing. Hollister es el lugar de trabajo perfecto para mí porque aquí se nutren de estos atributos. Muchos de mis proyectos implican la búsqueda de nuevas oportunidades empresariales y el hallazgo de soluciones de productos prometedoras para los mercados globales. En muchos sentidos, me considero un explorador que viaja por todo el mundo y aprende sobre la gente, las culturas y las conductas. Mis objetivos son encontrar la mejor solución de producto para el futuro y hacer la vida de quienes los utilizan más gratificante y digna.
Hollister cuenta con unas pautas denominadas "principios inmutables" que definen lo que significa ser asociado. Todos los principios inmutables son importantes para mí y me guían en mi viaje sin descanso en Hollister. La dignidad de la persona me motiva, ya que trabajo en innovaciones y promociones de productos. La dignidad humana es sagrada para mí, ya que trabajo para hacer la vida de nuestros clientes más digna y gratificante. El servicio no es solo una palabra, sino una promesa que intento cumplir cada día para mejorar la calidad de vida de los clientes. La integridad es una realidad que me motiva a dar siempre lo mejor de mí y a obtener satisfacción del trabajo bien hecho. Por último, adopto un sistema de administración para nuestros clientes, para mis compañeros y para toda la empresa. Todo ello me hace sentir bien por trabajar en algo significativo que repercute positivamente en la vida de las personas.
Hacemos que la vida sea más digna y gratificante